martes, 1 de noviembre de 2016

Prefacio



Desde mis heridas abiertas
y desde el lavarlas y curarlas,
desde mi ego elevado y falso 
y desde el Yo verdadero,
desde mi vida fragmentada
y desde la integración de ella,
desde mi desesperado grito
y desde mi respiro de paz,
desde mis temores ocultos
y desde mi confianza profunda,
desde  mis sombras más oscuras
y desde mi fuego encendido,
desde el no creer en ti
teniéndote a mi lado,
desde el no sentirte
mientras más presente estuviste,
desde la no percepción del amor
y desde mi amar más apasionado

es que escribo y me presento ante la vida.

Escucho sonar la puerta. No sé quién toca
ni qué desea, será una visita agradable o traerá 
noticias sombrías, no lo sé. 
Disculpen, voy a abrir la puerta.